"No te tapes la herida,si la mantienes tapada se te inflama más...
déjala,no te la toques,no se la moleste" decía mi abuela.
Eso te enseñan de pequeña,
y que difícil es no tocarse,intentas taparte,cubrirte,
pero yo insisto en tocar el alma abierta todos los días,
la llaga del corazón ...
te maltratas con el absurdo que nunca fue pero te clavó estaca,
te disparó con precisión,
pisaste espinas a pies descalzos,
fue aguijón en el ojo de tus ilusiones,
fue golpe fulminante en el cuerpo excitado,
fue una lastima escupida en tu mano extendida para dar amor,
es el moretón que se dilata y duele a cada segundo,
es ausencia,
es desamor de vida y muerte, es presencia,
besos pocos y obligados,
es una tristeza más grande que el cielo,
es el dolor mismo del dolor que grita y que no sabe esfumarse,fluir.
Son las lagrimas que todo el mundo ya conoce,que te queman las mejillas,
es el respirar que te arde en el pecho,
es mirar por mi ventana y descubrir que tú también miraste desde aquí,
son tantas cosas y tan pocas,
es dolor profundo...ya lo patético te roba palabras,
la incoherencia se apodera de tu mente y la inteligencia se va.
Se dispersan los gemidos,se vomitan las memorias,se exorcizan los deseos,
¿Cómo no me toco la herida y dejo respirar mi dolor?
Ady Alonit