Unidos en anochecer
despiertos,
sembramos toques y caricias largas,
sembramos toques y caricias largas,
acaramelándonos
con roces y sin muchas palabras
con roces y sin muchas palabras
dándonos vida en nuestras caras,
en nuestros adentros.
Tú queriéndome el vientre
yo descubriendo tu torso,
tu cuello,
tu lamento,
tu lengua en mi nombre.
Vida buena en nuestras almas
en nuestras mismas vidas,
enjugándonos :
manos
manos
piel
espalda...
Recostado,
tú en mi hombro
tú en mi hombro
miras el horizonte oscuro
lloras,
suplicas,
suplicas,
sangras.
Brota melancolía
pero aun así,
sonríes y no respondes...
sonríes y no respondes...
Yo lánguida y esquiva
sacrifico alegrías
llevo arena en mis manos afligidas,
no vivo tampoco,
no tengo sabor en mi boca,
rosa insípida.
Nuestros dedos felices cuentan estrellas
y bailan de manera triste...
Como dos muertos,
no cobran vida,
están olvidados,
como amantes,
que se marchitan cada vez
que el amor no existe.
Un amor que no fue,
que no existió,
que nunca podrá ser ...
que no existió,
que nunca podrá ser ...
by: ADY ALONIT,Copyright ©
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